RENACE UN NUEVO DÍA

Se perfila en la tarde el manto de la niebla,
cayendo presuroso y cubriéndolo todo,
entretejiendo en brumas, los coposos ramajes
que airosos desdibujan, su figura en el cielo.


Los pájaros entonan su postrer aleluya,
mientras baten sus alas y despliegan su canto,
en tierna sinfonía de gorjeos y trinos,
como himno de alabanza al día que se va.


La tarde va cayendo, la penumbra se viene,
la neblina es un manto que rodea de tules,
los árboles, los techos, las casas, los sembríos,
la gente que se tiende, serena a reposar.


Y mientras que la noche se adueña de la sombra,
con su andar silencioso, el tiempo volará.
La aurora corre presurosa al encuentro,
del día que en oriente, clareando viene ya.


La lobreguez de a poco se empieza a retirar,
y entre trinos y trovas que entretejen el aire,
un nuevo día vuelve de mieles a llenar,
las flores, los caminos, el diario trajinar.


El sol va diluyendo los tules de la niebla,
y allá, por el oriente, con tímidos fulgores,
su inicial refulgencia destella en las corolas,
diamantando el rocío que la aurora dejó.


Despliegan ya su canto, las aves en sus nidos,
los campos se matizan de dorado esplendor.
Todo es algarabía, canto, sol, ambrosía,

renace con el día, la esperanza… el amor….

13/11/07 -
Avefenixazul